Somos dos o muchos más.

¿Por qué ese querer recordar?
Ante nosotros la magia de lo desconocido
y siguiéndonos los pasos van
danzando
nuestras alegrías y tristezas
cogidas de la mano

¿Por qué dar vueltas a lo mismo?
El momento es una roca sudando dudas,
y somos titanes soplando sobre ella
los vientos de nuestra memoria líquida

Somos argonautas en busca del recuerdo vivo
somos el universo naciendo a base de agujeros negros

Entre maderas nobles duerme,
un ojo abierto y pantera negra,
la experiencia

y la inocencia descansa entre algodones.

1 comentario:

Afrodita dijo...

Nos refugiamos en nuestros bellos recuerdos, quizás, por medio a no aceptar un futuro vacío de esperanza, futuro que ya de por sí es esperanza, para evitr frustrarnos nuestro presente.

La melancolía nos paraliza,tratando evitar un proceso de abstracción de un futuro que no podemos concebir como una continuación viva de esos recuerdos.

La experiencia va violando lentamente y cruelmente nuestra inocencia descuartizándola en tristeza, pasando por la desesperación hasta terminar en locura.

Una locura, que es sinónima de cordura.

Seguimos vivos. Seguimos pensando. Seguimos sintiendo.

Seguimos vivos.

La dualidad cuerpo-alma platónica forma parte de tu esencia. Afortunad aquel que además de cuerpo, posee un alma.

Siguiendo con Platón, la reminiscencia, el volver a recordar, es conocimiento.